Cuenta la leyenda que una mujer indígena fue enterrada en la base de un árbol de Huanacaxtle; en tributo a ella se talló una cruz en el tronco y la gente comenzó a decir, “nos reuniremos en la Cruz de Huanacaxtle.”.
Hola otra vez!! Nosotras somos mar y carol. ¿Recuerdas que nuestra aventura anterior la vivimos en Lo de Marcos?. Permítenos contarte que la pasamos de lo mejor, llegar ahí es mucho más fácil y sencillo de lo que te puedas imaginar! Como olvidar a la gente tan amable, la playa, la comida que es exquisita, y sus fiestas patronales; no podemos dejar de contarte lo divertido que es pasar un día en Lo de Marcos, ¿qué esperas? ¡Corre a visitarlo, te está esperando!
Como ha sido una experiencia única en su estilo, hemos decidido continuar con nuestro espíritu aventurero, en esta ocasión elegimos visitar y conocer La Cruz de Huanacaxtle. Aquí es donde comienza hoy nuestra historia… Como ya saben nosotras vivimos en Valle de Banderas, partimos a Mezcales y ahí tomamos un taxi, de los rojos, que tienen ruta de San Juan a Punta de Mita, pagamos $ 14.00 pesos y ¡qué crees!, en 25 minutos ya estábamos en La Cruz de Huanacaxtle.
Caminamos por la calle Langosta, ahí nos encontramos con la glorieta de la cruz, que hace honor al nombre del pueblo. Cuenta la leyenda que el cuerpo de una mujer indígena se enterró en la base de un árbol gigantesco de Huanacaxtle; en tributo a ella se talló una cruz grande en el tronco del árbol, y la gente comenzó a decir, “nos reuniremos en la cruz de Huanacaxtle.”
A estar en la plaza, bajo la sombra de una frondosa parota, sentimos como el fresco viento traía a nosotras el rico aroma del mar. En ese instante dijimos ¡que comience la aventura! Nos fuimos a dar un recorrido por la Marina Riviera Nayarit, que contrasta con la vida típica de un pueblo de pescadores y restauranteros frente a lo sofisticado de un proyecto como la marina
Todo este encanto marino y pesquero no podría estar completo sin la playa de La Cruz, de oleaje y pendiente suave, que se extiende en cinco kilómetros divididos en cinco secciones: El Tizate, Cruz de Huanacaxtle, La Manzanilla, Piedra Blanca y Arena Blanca. Aquí encontramos, además de los placeres propios de la playa, diversos restaurantes, donde disfrutamos de platillos preparados con pescado fresco del día. La Cruz de Huanacaxtle y su gente es heredera de una tradición culinaria en comida del mar de más de cincuenta años. La pesca, es una de las principales actividades económicas del lugar gracias a la abundancia de especies como el atún y el marlín, entre otras de gran aprecio por su exquisito sabor y modo de preparación.
La Cruz de Huanacaxtle nos fascinó porque nos encontramos con Hikuri, una galería de arte huichol, restaurante y café, que apoya a las comunidades indígenas. Estamos dispuestas a regresar a seguir conociendo y descubriendo aun más; ya que esto solo fue una probadita de La Cruz. Y por qué no regresar el día 3 de mayo, para ser participes de la celebración de la fiesta patronal en honor a La Santa Cruz, cuyo novenario empieza este próximo 26 de abril.