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Cuando se cumple el vigésimo aniversario de la muerte de la “reina del Tex-Mex”, Selena, a la edad de 23 años, su legado sigue presente en las nuevas generaciones que mantienen vigente su música y sus canciones.
La cantante, nacida en Lake Jackson, Texas, murió el 31 de marzo de 1995 a manos de la presidenta de su club de admiradores, Yolanda Saldivar, y desde entonces es recordada por el sitio predominante que llegó a ocupar en un género dominado por hombres.
Para amantes y expertos de la de música regional mexicana, el éxito de Selena Quintanilla Pérez en este género representó un logro para las mujeres que perdura en las nuevas generaciones.
“Bidi, bidi, bom, bom”, “La carcacha”, “Techno cumbia” y “Como la flor” fueron algunos de los grandes éxitos de esta joven artista que aún son escuchados y bailados en bares y discotecas de moda.
El estilo fresco y de complicidad con el público de Selena, quien cumpliría 44 años de edad el próximo abril, fue determinante en la carrera profesional del grupo Los Dinos, agrupación con la que comenzó su vida artística cantando en español.
En la década de 1990, Selena, nacida en un familia ligada a la industria musical, saltó a la fama gracias a canciones como “El chico del apartamento”, “Fotos y recuerdos”, “Amor prohibido” y “Si una vez”, entre otras.
Por esta época, la influencia de Selena fue más allá de la música.
Su ropa interior bordada, sus ajustados pantalones y hasta sus peinados fueron imitados por las jóvenes que encontraron en la artista un modelo a seguir.
Esta influencia la llevó a ser considerada por algunos comentaristas como “la Madonna mexicana”, en referencia la reconocida “reina del pop” estadounidense.
Después de su triunfo en su tierra natal y a lo largo de la frontera sur de Estados Unidos, la ciudad de Monterrey se convirtió en la primera de México en abrirle las puertas.
Las canciones de Selena tuvieron gran éxito en el género del “Tex-Mex”, aunque también las interpretó en otros ritmos, como la balada y cumbia.
Más allá de los múltiples premios, reconocimientos y la venta récord de sus álbumes, Selena fue capaz de acaparar el público anglo y además traspasar fronteras.
Educada en Estados Unidos bajo las costumbres mexicanas, Selena se convirtió en un importante exponente de ambas culturas.
En vida, las ventas de los álbumes de Selena alcanzaron más de 60 millones de copias, y además logró convertirse en la primera artista de origen hispano femenina en aparecer al mismo tiempo, con cinco discos diferentes, en las listas de Billboard.
Todo esto la llevó a ser considerada para entonces la cantante latina más influyente, y ahora persiste su éxito en la parte digital, donde Selena reina en las listas del portal iTunes.
Temas como “Dreaming of you”, “I could fall in love” y “Como la flor” ocupan los primeros sitios en descargas, e incluso por encima de artistas consagrados en el género.
Desde sus muerte, marzo es el mes de Selena, y la industria discográfica se encarga de recordarlo con la promoción de sus temas en sus listas más populares.
A 20 años de su fallecimiento, en un motel de la localidad tejana de Corpus Christi, el mundo de la música regional mexicana ha visto surgir muchas otras artistas, con propuestas y características diferentes, pero inspiradas en ella.
Su legado ha influido en cantantes como Chiquis Rivera, hija de otro mito de la música popular de raíces mexicanas, Jenni Rivera, Marisol y Vicky Terrazas, integrantes del grupo Los Horóscopos de Durango, y Helen Ochoa, una joven promesa del género regional mexicano.
