Gracias a una denuncia ciudadana, el gobierno municipal que preside Ramón Guerrero Martínez logró el rescate y liberación de una boa constrictor, también conocida como Hilamacoa, que por desconocimiento y falta de información de quien la tenía a su cargo, presentaba un alto grado de desnutrición y deshidratación que ponían en riesgo su vida.
Este martes, la Dirección de Medio Ambiente y Ecología, realizó la liberación de este ejemplar así como de una serpiente de cascabel (Crotalus basiliscus), que fue atrapada por personal de Bomberos Municipal dentro de un domicilio, por lo que tras la recuperación que presentaba la boa y las buenas condiciones en que se encontraban ambas especies, fueron integradas a un espacio natural fuera de la zona urbana, propicio para su supervivencia.
Al respecto, Juan José Navarro Amaral, titular de la dependencia municipal, detalló que el rescate de la boa constrictor se trató de un caso especial, pues a través de una denuncia, pudo recuperarse de una casa habitación ubicada cerca de El Ranchito, en la que se encontraba en cautiverio dentro de una pecera en un estado de salud crítico, ya que la persona que la tenía a su cargo desconocía cuales eran los cuidados y alimentación que debía brindarle.
“La boa mide entre el metro cincuenta, el metro ochenta, ya es adulta pero la condición de salud que guardaba era increíblemente deplorable o sea, esa serpiente pasó sin alimentarse meses”, señaló.
Ante ello, las autoridades municipales dialogaron con el propietario y le explicaron las implicaciones legales que a nivel federal representa el tener una especie de fauna silvestre en cautiverio, teniendo una respuesta favorable del ciudadano quien aceptó no sabía sobre el tema.
Navarro Amaral resaltó que “desafortunadamente muchos de nosotros creemos que el tener un reptil, tener una ave, tener una mascota es simplemente decir: tengo aquí una serpiente y que bonito, pero realmente representa mucho cuidado, mucha atención, mucha responsabilidad; desafortunadamente desconocemos a veces cuál es el alimento para cada una de las diferentes especies y fue lo que pasó, simplemente la pusieron en una pecera y ahí creció sin alimentarla, sin darle agua ni nada. Afortunadamente el veterinario hizo ahí su trabajo y la recuperó”.
Sobre la serpiente de cascabel, esta fue reportada por los moradores de una casa habitación y rescatada por Bomberos en buen estado de salud, por lo que únicamente fue reintegrada a su hábitat natural. “Aquí lo interesante es que antes de matarla hablaron a Bomberos, fueron por ella y nos la entregan a nosotros”, subrayó el director de Ecología.
Precisó además que ambas especies están protegidas por la Norma-059 bajo el estatus de riesgo para la boa constrictor, y de protección especial para la serpiente de cascabel.