La obesidad infantil es un problema multifactorial, pero se ha observado que la alimentación que la mujer embarazada lleva durante la gestación influye en la predisposición a desarrollo de esta condición en el infante, dijo la experta el Instituto Mexicano del Seguro Social, Lucero Rodríguez Gudiño:.
La alimentación de la mamá en el embarazo es un factor importante, desde ahí se propicia que el niño tenga más predisposición a ser obeso.
Cuando las mujeres consumen mucha azúcar en el embarazo se conoce como glucotoxicidad y ésta se heredando al hijo.
El amamantar es un factor de prevención para obesidad, diabetes y otras enfermedades crónicas.
México ocupa el primer lugar en obesidad infantil a nivel mundial por encima de otros países como Estados Unidos.
Para considerar un problema de obesidad, la persona tiene que tener un Índice de Masa Corporal (IMC) de 30.