Miguel Herrera lo tiene claro en su mente. No es por los seis goles, sino por el desempeño y la entrega que ha demostrado Marco Fabián en estos meses con el Cruz Azul, al que se ha cargado al hombro en momentos importantes, por lo que el mediocampista se ganó su convocatoria a la Selección Mexicana.
Hoy la entrega, profesionalismo y dedicación del volante tapatío han hecho que recobre el nivel que mostró en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, y el próximo 2 de abril se jugará su última carta para agradar al Piojo Herrera y ganarse su convocatoria a Brasil 2014.
Estoy muy agradecido con Miguel por la oportunidad que me está brindando, la verdad que no he tenido ningún contacto todavía con él, pero si así se llega a dar estoy agradecido y feliz, porque es lo que estaba esperando. Voy muy comprometido y con la mentalidad de ir a pelear un puesto deportivamente para poder ganarme un lugar en el Mundial”, expuso emocionado.
Marco está decidido y consciente que tiene un gran talento en sus pies, por lo que ya no quiere seguir siendo una promesa en la Selección mayor, sino una realidad que puede echarse el equipo al hombro.
Estoy preparado para la Selección, sabemos que hay mucha calidad de los jugadores y hay una pelea importante, pero estoy comprometido para pelear ese puesto y para poder ayudarle dentro de ese esquema que tiene en la cancha”, sentenció.
Sin embargo, sabe que el partido amistoso ante Estados Unidos no marcará su futuro en el Tricolor de aquí a que se dé a conocer la lista definitiva que acudirá a la Copa del Mundo.
Me gustan mucho los retos, y ésta es una oportunidad importante para que me conozca y pueda trabajar por primera vez con él. Sé que conoce mi futbol y no por un partido que lo juegue bien o mal va a definir que vaya o no al Mundial, eso es causa de muchas otras situaciones. Sólo quiero ir a mostrarme”, insistió.
El cementero quiere estar en la última lista de convocados que lo lleve a Brasil 2014, para ahí demostrar que el futbolista mexicano tiene la capacidad para triunfar y no le tiene miedo al éxito, como ya lo demostró con la obtención de la medalla de oro en los Olímpicos de Londres 2012.
Ir al Mundial sería la mejor noticia, pero no hay que adelantar las cosas. Pero si se da iría con la misma idea con la que fui a los Juegos Olímpicos: a romper límites. No sólo es ir al quinto o cuarto partido sino a tratar de ir a ser campeones del mundo, yo no le tengo miedo al éxito, aunque muchos no lo crean, México tiene la calidad para poder ser campeón del mundo”, señaló.
El exchiva ha madurado, y eso lo demuestra tanto en la cancha como fuera de ella. El volante que estaba acostumbrado a atacar, hoy con Luis Fernando Tena ha demostrado que también puede sacrificarse con labores defensivas por el bien del equipo.
Defender es algo que he aprendido mucho, porque antes no se me daba, pero creo que es una posición que domino muy bien, sobre todo porque ando muy bien físicamente. Ahora he comprendido muy bien esa posición, la jugué también en los Juegos Olímpicos y estoy destacando mucho por ese lado. Fausto Pinto siempre está detrás de mí y es él quien me está ubicando. Para correr menos, uno tiene que estar concentrado y muy atento, nos hemos entendido muy bien por esa banda.