Cuando parecía que el touchdown de 8 yardas de Knile Davis con dos minutos por jugar cerraría una noche redonda en el Arrowhead Stadium de Kansas City, la magia de Peyton Manning y un costoso error de Jamal Charles hicieron posible el milagro para los Broncos de Denver, que ganaron en dramática voltereta 31-24 a los Jefes de Kansas City.
Fue un encuentro muy cerrado, que inició muy mal para los visitantes, quienes se vieron abajo 14-0 a inicios del segundo cuarto.
Sin embargo, poco a poco la ofensiva de los Broncos, comandada por Manning tomó ritmo y antes de terminar el tercer cuarto el encuentro ya se encontraba empatado a 17 puntos.
Fue cuando apareció el drama en Kansas City, ya que una corrida de Davis parecía darles la victoria a los Jefes 24-17
Pero ante Peyton Manning nada es imposible y el mariscal de Denver comandó una ofensiva de 80 yardas para empatar el juego con menos de 40 segundos en el reloj.
Y cuando el tiempo extra parecía un hecho, vino la jugada crítica del partido. En primera oportunidad, los Jefes le dieron el balón a su corredor estrella, Jamal Charles, quien al ser tackleado soltó el balón, que fue recuperado por el esquinero Bradley Roby, quien lo regresó hasta touchdown y con eso sentenció la dramática remontada de los Broncos.