Honduras venció 2-1 a México a domicilio la noche del viernes, en partido de la séptima jornada del hexagonal eliminatorio de la Concacaf para el Mundial de Brasil-2014 jugado en el estadio Azteca de la Ciudad de México.
Oribe Peralta había puesto en ventaja a México al minuto seis. Jerry Bengtson, al 64, y Carlo Costly, al 66, anotaron los goles del triunfo de Honduras.
A México su gol tempranero le sirvió para liberar gran parte de la presión acumulada en la víspera del partido. Tras ponerse en ventaja, el Tri comenzó a darle toque a la pelota.
No obstante, el intento mexicano de hilvanar jugadas no fue más allá del minuto 30. Con el correr del tiempo los locales comenzaron a tirar pelotazos que resultaron estériles.
En la primera mitad, Honduras ofreció muy poco, casi nada a la ofensiva y en ningún momento exigió la intervención del portero mexicano, Jesús Corona.
A los catrachos Andy Najar y Bonieck García les falló el control sobre la pelota y habilidad para superar a Gerardo Torrado y Fernando Arce, los primeros retenes del bando azteca. Como consecuencia, Costly pasó inadvertido en la punta.
Después del descanso, Honduras ganó presencia en la cancha con el ingreso de Jerry Bengtson, quien entró a pelear pelotas y a cerrar circuitos con sus compañeros de ofensiva.
El despertar hondureño se combinó con dos yerros en el cuadro mexicano que Bengtson y Costly capitalizaron en los dos goles hondureños para esta nueva versión del ‘Aztecazo’.
Con este resultado, Honduras subió al tercer lugar de la clasificación con 10 puntos y México bajó al cuarto puesto al quedarse con ocho unidades.
Al inicio de las acciones, la selección de Honduras trató de ejercer presión sobre el área rival, pero repentinamente fue sorprendida en un rápido despliegue mexicano.
Giovani dos Santos se escapó a gran velocidad desde la media cancha, ingresó al área por el costado izquierdo y esperó el momento preciso para dar el pase al centro donde Peralta apareció para chocar la pelota con el pie derecho y firmar el 1-0.
De esta manera, México ponía fin a una racha de 281 minutos sin marcar gol en el estadio Azteca.
La última anotación del Tri en su casa había sido ante El Salvador en el cierre de la anterior fase eliminatoria de la Concacaf. Posteriormente, ya en este hexagonal, hilvanó tres empates a cero ante Jamaica, Estados Unidos y Costa Rica.
Después del gol, el mejor aviso que México le mandó al portero Noel Valladares fue un lejano tiro libre ejecutado por Christian ‘Chaco’ Giménez al minuto 15. La pelota fue directamente a las manos del guardameta catracho.
Giménez que tanta expectación causó como posible solución para las deficiencias ofensivas mexicanas no tuvo gran influencia en el partido. En el complemento el ‘Chaco’ fue sustituido por Andrés Guardado, pero tampoco hubo mejora.
Ya afianzados los hondureños en la cancha vinieron dos garrafales pifias de la zaga mexicana.
Al 64, Carlos Salcido intentó despejar con la cabeza un centro al área. Lo hizo con deficiencia y la jugada quedó en los botines de Costly. El atacante catracho protegió el balón y se acomodó para disparar al arco. Corona no pudo contener el tiro y dejó un rebote que Bengtson convirtió en el 1-1.
Un par de minutos después, Diego Reyes fue incapaz de cortar un despeja de la defensa de la bicolor. Costly se hizo del esférico y se lanzó al frente para fusilar a Corona y hacerle el 2-1 con un disparo cruzado.
En su último intento de reacción, el mexicano Javier Aquino puso un testarazo en el travesaño de Valladares.
A México lo terminó de invadir la desesperación y su público, decepcionado y molesto, comenzó a corear los oles con las jugadas hondureñas. Al costado de la cancha, el seleccionador azteca José Manuel de la Torre ya ni indicaciones daba, si acaso algunos manotazos.
Además, la gente reunida en las tribunas del estadio Azteca exigió nuevamente, ahora con más coraje, la salida del seleccionador mexicano con el grito “Fuera Chepo, fuera Chepo”.