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Pocas personas tienen la dicha de formarse en una institución educativa en la que después de egresar, les abren las puertas para consolidarse como profesionista. Uno de esos afortunados seres humanos es Sandra Arredondo Hinojosa, quien el pasado 22 de agosto cumplió 10 años como colaboradora del Instituto Tecnológico Superior de Puerto Vallarta, y éste a su vez, festejó 16 años de historia, el pasado 06 de septiembre.
Quien actualmente se desenvuelve en el área de Recursos Materiales, compartió que en sus inicios como estudiante de la Ingeniería en Sistemas Computacionales, siempre prevalecía la postura crítica y analítica de las cosas, con el fin de exigir una solución a los problemas como estudiantes. Sin embargo, pocas veces consideraba el trabajo que hay detrás, y todo lo que conlleva el respetar procesos, para solucionar problemas.
“Yo creo que en las exigencias que tiene uno como alumno, a veces no considera el trabajo que está atrás de lo que pides. A veces somos exigentes queriendo una respuesta o solución a algún problema como estudiante, sin pensar en lo demás. En contra parte, cuando estás del otro lado (ejerciendo), te das cuenta que no todo se resuelve con una barita mágica, te das cuenta que hay un proceso que se debe llevar para dar solución a cualquier situación”, expresó.
Por otro lado, Sandra Arredondo mencionó que el significado que el Tec Vallarta imprime a su vida es muy valioso, debido a que ha formado parte de su existencia y también es como su segunda familia. “El Instituto es como mi segunda familia porque aquí paso mucho tiempo de mi vida… Han sido 10 años maravillosos que han significado mucho esfuerzo, dedicación y trabajo en equipo”, mencionó a la Jefatura de Promoción y Difusión.
Quien es madre de familia de dos pequeños, resaltó que los valores que la definen como colaboradora del Tec Vallarta y como profesionista, son la congruencia por hacer lo que dice, la lealtad hacia la Institución y el respeto hacia sus compañeros de trabajo, con el firme propósito de conseguir los objetivos que esta universidad demanda.
Arredondo Hinojosa añadió que en sus inicios estuvo durante 5 años en el área de biblioteca, después en la Subdirección de Planeación, donde duró 3 años, posteriormente un año en el área de Mantenimiento, y actualmente en Recursos Materiales.
“De todos estos trabajos, el que más me gustó fue la Subdirección de Planeación, ya que mi trabajo era lo referente a la calidad, procesos y procedimientos de la Institución, y como soy muy metódica, disfruté mucho esa etapa de mi vida”, concluyó.
