La selección mexicana quedó eliminada de la Copa América al perder por 1-2 contra Ecuador, que fue superior a su rival, pero que, con tres puntos, deberá esperar al resultado de otros dos grupos del torneo para clasificarse a cuartos de final como uno de los mejores terceros.
Este resultado en Rancagua automáticamente clasificó a cuartos de final a las otras componentes del grupo A, las selecciones de Chile y Bolivia, empatadas con cuatro puntos, que más tarde cierran la jornada en Santiago.
Ecuador, bien dirigida por Noboa y Lastra, controló hoy el juego, hizo suya la pelota, se anticipó en la mayoría de acciones y mostró más veteranía, lo que le permitió cobrar ventaja de 0-2 en la primera hora de juego.
Ya en el primer tiempo, dominó el partido. Se adueñó de la pelota desde bien pronto con un centro del campo que abasteció de balones a sus delanteros y se mostró muy firme en defensa.
Sin embargo, esa superioridad no estuvo acompañada de claridad en las llegadas en ataque de sus delanteros, lo que restó emoción a un encuentro que hasta el minuto 45 apenas ofreció situaciones de peligro.
Los mexicanos estuvieron lejos de mostrarse como el equipo incisivo y compacto que le marcó tres goles a Chile y fueron inferiores a un rival que dejó clara su mayor experiencia.
Pese a ello, la primera ocasión de gol del encuentro, algo tibia en cualquier caso, corrió por cuenta del goleador mexicano Matías Vuoso, que en una contra disparó cruzado. Fue también la última antes del descanso para su equipo.
Tres minutos después, una pérdida del balón en la salida de los mexicanos fue aprovechada por Enner Valencia para, en un contragolpe, profundizar con rapidez en una acción en la que el balón llegó a Miler Bolaños quien de tiro cruzado y de abajo arriba estableció el 0-1.
Todo continuó igual tras el tanto de Bolaños, ya que México no consiguió contrarrestar el poderío de los ecuatorianos, un equipo que no dejaba de soñar con un resultado que le permitiera mantener el sueño de la clasificación.
En el descanso, el técnico mexicano, Miguel Herrera, decidió cambiar el planteamiento defensivo de tres centrales y retiró al lateral Velarde para armar una defensa de cuatro y dar entrada a Javier Aquino por la banda derecha. Casi de inmediato Marco Fabián entro por Javier Güemez en la medular mexicana.
Sin que cambiara la tónica del encuentro, una nueva pérdida de balón del equipo mexicano propició una rápida llegada de Ecuador en la que Enner Valencia se plantó solo ante Domínguez para lograr el 0-2 cuando quedaba poco más de media hora de juego.
El partido no quedó cerrado, ya que poco después, una falta de Achiller sobre Ayala fue sancionada con penalti y Raúl Jiménez acortó diferencias en el marcador y metió a los mexicanos de nuevo en el partido.
El tanto de penalti de México ajustó el marcador, pero no atemorizó a Ecuador, que también al contragolpe estuvo cerca de hacer el tercer gol en las jugadas inmediatas.
México no tuvo fuerzas suficientes para marcar un segundo tanto que habría eliminado a Ecuador, pese a alguna acción de ataque en tiempo de prolongación.