Una francesa de 18 años de edad que nació con VIH ha visto controlada su infección a un nivel casi no detectable, pese a haber detenido el tratamiento hace 12 años y sus médicos consideran que se trata de una remisión sin precedente.
La joven podría tener alguna forma de resistencia natural al VIH todavía no descubierta, pero su caso renueva las esperanzas de que un tratamiento pronto y enérgico pueda limitar el alcance del virus y, quizás en algunos casos, permitir que los pacientes lo controlen sin tomar medicamentos durante toda su vida.
Hace unos pocos años, los médicos reportaron un caso similar: una niña de Mississippi que mantuvo a raya el VIH durante 27 meses sin tratamiento; sin embargo, después el virus se reactivó y aplastó las esperanzas de que el tratamiento temprano pudiera haberla curado.
La joven está en proceso de remisión pero sigue infectada y no está curada. La paciente no presenta ninguna de las variantes genéticas ni otros biomarcadores que se sabe contribuyen naturalmente a controlar o protegerse de la infección del VIH, ni fue capaz de suprimir el virus por sí sola antes de recibir la poderosa combinación de fármacos, expuso Asier Sáez-Cirión, líder de la investigación.
“Esto es digno de entusiasmo. Este caso es claramente una nueva prueba del beneficio poderoso que significa comenzar el tratamiento lo antes posible”, pero no se sabe si la remisión durará, señaló Francoise Barre-Sinoussi, científica del Instituto Pasteur y codescubridora del VIH.