En los últimos cinco años Estados Unidos ha aportado 14 millones de dólares a través de la Iniciativa Mérida para apoyar al sistema penitenciario mexicano tanto federal como estatal, a fin de obtener acreditaciones internacionales.
El embajador de Estados Unidos en México, Anthony Wayne, señaló lo anterior durante la clausura de la Primera Conferencia de la Asociación Americana de Correccionales (ACA), informó la embajada estadounidense.
El diplomático señaló que también se ha facilitado equipo, entrenamiento y asistencia técnica para que las prisiones mexicanas se certifiquen como instalaciones seguras de acuerdo con los estándares internacionales de la ACA.
A la fecha, ocho de las 16 prisiones federales mexicanas cuentan ya con ese certificado, lo mismo que la Academia Nacional de Entrenamiento Penitenciario y seis prisiones estatales: cinco en Chihuahua y una en Baja California.
En la misma ceremonia Jeff Washington, subdirector de la ACA, destacó la importancia de que los centros de reclusión cuenten con certificados de calidad en sus procedimientos, pues con ello se garantiza una gestión segura.
La idea es que el personal penitenciario cuente con las herramientas para combatir vicios en centros de detención, como la presencia y operación de organizaciones criminales transnacionales; grupos de riesgo, como pandillas o cárteles de la droga; y violencia, riñas y fugas de reos.