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Bajo manto de historia rusa que fue desde la literatura, cultura y hasta aportaciones tecnológicas al mundo, los Juegos Olímpicos de Invierno Sochi 2014 fueron inaugurados en ceremonia realizada en el estadio Olímpico de Fisht, en donde el presidente del COI, Thomas Bach, destacó la unidad entre las naciones.
Con asistencia del presidente Vladimir Putin, quien fue el encargado de dar la bienvenida a los cerca de siete mil atletas de todo el mundo, que buscarán las preseas en cada una de las pruebas, se cumplió el sueño del pueblo ruso de albergar la justa. El telón de la ceremonia de apertura de esta justa, que contó con inversión de unos 50 mil millones de dólares y que supera el gasto hecho para Londres 2012, se alzó en medio de las notas de pianista Denis Matsuev y la soprano Anna Netrebko, quien interpretó el himno nacional ruso.
Luego comenzó el desfile de las 88 delegaciones, entre ellas la de Estados Unidos con 230 competidores y que fue la más numerosa, no sin antes salir el lábaro patrio de Grecia como el país en donde nacieron los Juegos Olímpicos. Ante la presencia de líderes políticos mundiales, como el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, cada una de las naciones representantes hizo su presentación singular sobre la enorme pista de hielo y con la bandera de su nación. Uno de los momentos emotivos fue cuando a escena salió la representación de Rusia, la cual fue ovacionada por los 40 mil aficionados reunidos en el estadio. Los valores de movimiento olímpico y el crisol de la cultura rusa fue lo preponderante en esta fiesta deportiva.
Las escenas de la novela de León Tolstói –La guerra y la paz- hasta los clásicos ballets enmarcaron la apertura de la máxima justa invernal, así como el vaivén del compositor Alfred Schnittke, quien transportó al público al pasado ruso. El presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach, destacó los valores olímpicos los cuales son símbolos de unidad y respeto en el mundo, “ustedes traen los valores olímpicos, los juegos en donde quieran que sean unen a la gente”. Llamó a la concordia y desde luego agradeció a los líderes políticos por apoyar a sus atletas, que son sus mejores embajadores en un evento de este tipo.
Luego dos de las más emblemáticas estrellas deportivas de Rusia, como la tenista María Sharapova y la pertiguista Yelena Isinvayeva, considerada la mejor en la historia del atletismo mundial, realizaron el último recorrido de la llama olímpica, la cual quedó inmortalizada en el pebetero.
El último tramo lo hizo la famosa patinadora Irina Rodnina y del legendario portero de hockey sobre hielo, Vladislav Tretiak. Así, tras 65 mil kilómetros de recorrido, la llama olímpica se encendió en pleno corazón de Sochi para el inicio de la fiesta rusa.
Cabe señalar que México estará representado por el emblemático esquiador Hubertus Von Hohenlohe, quien competirá en sus sextos juegos olímpicos, en la prueba de Slalom.
