Posiblemente solo en la Jornada 13 de la Liga MX pueda darse un partido en donde Dante López pueda romper su sequía de goles al tiempo que un ‘Hermoso’ “indispuesto” dobleteara para los suyos.
El resultado no estuvo a la altura de la anécdota para Pumas, que tuvo que esperar 12 jornadas para que Dante López volviera a marcar un gol, porque Santos robó el dominio y con dos goles de Oribe Peralta, quien rechazó la convocatoria a la selección mexicana por fatiga, demostrara que está óptimo cuando Santos lo necesita, incluso hasta después del minuto 90.
Apenas a los tres minutos de juego, Dante encontró un servicio raso corriendo cerca de la línea de gol. Ya había estrellado la oportunidad en el portero santista Oswaldo Sánchez, cuando el balón regresó para pegarle en el hombro y ahora sí, colarse en la portería para el 1-0.
Santos tardó en sacudirse ese mazazo tempranero. Una vez que encontró la velocidad, la prisa se apoderó de los ‘Guerreros’ y el ritmo llegó hasta después del minuto 21.
Fue en ese momento cuando Oribe Peralta (propenso a la fatiga, al menos con el Tri) remató de primero en ‘meteorito’ que venía en picada desde el tiro de esquina para endemoniar su trayectoria hacia la portería de Alejandro Palacios, que apenas vio el balón.
Experimentando en carne propia de los que era capaz del oponente, ambos equipos bajaron el ritmo del partido en el cenit del primer tiempo. La diferencia fue que Universidad no salió de esa zona de confort, salvo con algunos bufidos esporádicos, mientras que el equipo lagunero recuperó su pulso ofensivo con las combinaciones de Darwin Quintero y Andrés Rentería.
Daniel Ludueña hace la diferencia en cualquier momento para Pumas. Dio el pase del gol y puso medio para un segundo que no fue completado por Dante López (31’), quien en otro mano a manos volvió a estrellar su tiro en el portero, pero esta vez el balón no le regresó.
Santos tiene su fortaleza en la ofensiva. Las incursiones de Mauro Cejas; Darwin Quintero por el extremo contrario al que vaya Rentería y un Oribe Peralta siempre listo, tocaron el balón en el área a lo largo del segundo tiempo pusieron en predicamentos a la defensa universitaria.
Pumas consintió a Santos para que se le acercara hasta el borde de su área, pero no más. Paredes entre Oribe y Rentería (79’), centros filtrados de Juan Pablo Rodríguez (84’), no conseguían dejar juntos al hombre y el balón cerca del arquero Palacios. El equipo de José Luis Trejo ya había renunciado a l ataque y dedicó toda su concentración a bloquear a los de Caixinha.
El colapso llegó a los 89 minutos con la expulsión a Quintana. Se rompió el perfecto equilibrio y tres minutos después, Palacios se equivocó en la salida, se derribó junto a su defensa y le dejó el balón a Oribe, quien lo golpeó con la cabeza para conseguir la voltereta de 2-1.
Sucesos extraños en el segundo partido de la Jornada 13, la cabalística, pero no lo suficiente para anular el castigo que suelen tener los equipos que se dedican a empatar los partidos.