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Con el lábaro nacional ondeando a toda asta en la plaza de armas de esta ciudad, autoridades civiles y militares, encabezadas por el regidor Leopoldo Lomelí, en representación del alcalde interino Rodolfo Domínguez Monroy, conmemoraron el 104 aniversario de la firma de los Tratados de Teoloyucan, hecho con el que se dio el paso definitivo para la consolidación del Ejército Constitucionalista como fuerza institucional, que a partir de la constitución de 1917, cambió a Ejército Mexicano, como se le conoce actualmente.
La directora de Desarrollo Económico del Ayuntamiento, Emma Leticia Baca Olguín, dio lectura a los antecedentes de este acontecimiento histórico que data desde el inicio de la Revolución Mexicana, y los combates que siguieron después del asesinato de Madero y la usurpación del poder por parte de Victoriano Huerta.
Tras una serie de importantes victorias del Ejército Constitucionalista, el régimen huertista fue desmoronándose, provocando la renuncia de Huerta y su exilio a Europa, quedando como presidente interino su secretario de Relaciones Exteriores, Francisco Carvajal, quien iniciaría una política pacifista con los revolucionarios y pidió detuvieran su avance sobre la ciudad de México, ofreciendo a cambio la reinstalación de la XXVI legislatura disuelta por Huerta y la convocatoria a elecciones para asignar nuevos mandatarios.
“Los constitucionalistas no aceptaron la proposición de Carvajal, ya que ello equivaldría a reconocer la legitimidad de su gobierno que no era posible por ser el sucesor de un gobierno usurpador. Venustiano Carranza pidió la rendición absoluta e inconstitucional de las fuerzas federales; mientras esto sucedía, en Saltillo, las fuerzas constitucionales continuaban avanzando sobre las plazas que aún continuaban en poder de los federales”, indicó la funcionaria municipal.
Para principios de agosto de 1914, los constitucionalistas se ubicaron en Teoloyucan. Siguieron los diálogos entre el presidente interino Carvajal, Venustiano Carranza y Álvaro Obregón, y finalmente se reunieron en un campamento en Teoloyucan, en donde estuvieron presentes diplomáticos de Francia, Gran Bretaña, Guatemala y Estados Unidos.
Venustiano Carranza facultó al general Álvaro Obregón para que se encargara personalmente de los términos de rendición del Ejército Federal, y se hicieron los tratos correspondientes con Carvajal que firmó su renuncia. Dos días después se firmaría un acuerdo preliminar, el 13 de agosto de 1914 por parte del general Álvaro Obregón y Lucio Blanco, en nombre del Ejército Constitucionalista y en representación del Ejército Federal Gustavo A. Salas, y de la Armada Nacional el vicealmirante Othón P. Blanco.
En estos documentos se fijaron los procedimientos de evacuación de la ciudad de México por los federales y ocupación de la misma por los constitucionalistas, con lo que la primera acta de los Tratados de Teoloyucan dejó en claro las bases por las cuales el ejército constitucionalista entró a la capital del país.
“El día 15 de agosto llega a la capital de la república el general Álvaro Obregón, al frente del ejército del noroeste, y el 20 de agosto Venustiano Carranza hizo su entrada triunfal acompañado por los más destacados jefes constitucionalistas. Con la firma de los tratados de Teoloyucan en 1914, se dio el paso definitivo para la consolidación del ejército constitucionalista como fuerza institucional”, concluyó la oradora de esta ceremonia.
Además de la presencia de autoridades y de los oficiales de la Dirección de Seguridad Ciudadana de Puerto Vallarta, en esta conmemoración se contó con la participación de elementos del Ejército Mexicano de la 41ª Zona Militar.
